abandonó a su esposa sin remordimientos cambiándola por una joven millonaria que le prometía una vida de lujos y poder se sintió imparable convencido de que había tomado la mejor decisión pero lo que nunca imaginó fue que el destino tenía preparada una lección que lo marcaría para siempre mientras él caía en la ruina la mujer que despreciaba resurgira como un fénix y cuando sus caminos volvieron a cruzarse descubrió una verdad que lo destrozó por completo quieres saber qué sucedió no te despegues de esta historia

llena de emociones y giros inesperados Dime desde dónde nos ves escribe en los comentarios y no olvides suscribirte para más historias emocionantes Empezamos el aroma del café recién hecho se mezclaba con el olor a pan tostado en la pequeña cocina del apartamento era una mañana más una rutina más Laura se movía entre la cafetera y la mesa con la costumbre de quien Lleva años repitiendo los mismos gestos los mismos rituales sirvió dos tazas colocando una frente a Álvaro como lo hacía todos los días él estaba sentado en la mesa con la
vista clavada en su teléfono deslizando la pantalla con el ceño fruncido apenas notó la presencia de Laura cuando ella dejó la taza frente a él tu café dijo ella con una pequeña sonrisa esperando al menos un gesto de agradecimiento Álvaro la tomó sin levantar la mirada bebió un sorbo y frunció los labios le pusiste demasiada azúcar Laura parpadeó y dejó escapar un leve Suspiro lo preparé como siempre él no contestó se limitó a dejar la taza sobre la mesa como si fuera un detalle insignificante algo sin importancia últimamente todo
parecía carecer de importancia para él su tud había cambiado Desde hacía meses ya no la miraba como antes ya no le hablaba con dulzura ya no la tomaba de la mano sin razón sus conversaciones se habían vuelto frías distantes llenas de silencios incómodos Laura se había esforzado por ignorarlo se decía a sí misma que era solo una fase que tal vez era estrés que las cosas mejorarían con el tiempo pero en lo más profundo de su corazón una angustia latente le deía que algo estaba mal lo notaba en la manera
en que él se arreglaba con más esmero antes de salir al trabajo en el perfume Caro que usaba ahora en los nuevos trajes que había comprado sin siquiera consultarla lo notaba en las noches en que llegaba tarde sin una explicación Clara en los mensajes que revisaba con una sonrisa en los labios y luego borraba con rapidez ese día como tantos otros Álvaro terminó su café a medias y se puso de pie hoy Llegaré tarde dijo con indiferencia mientras se ajustaba el reloj en la muñeca Laura sintió un pequeño escalofrío otra vez preguntó con
cautela últimamente llegas tarde casi todos los días él siguió acomodándose la camisa frente al espejo sin siquiera voltear a verla cosas del trabajo no me esperes despierta el estómago de Laura se contrajo Álvaro hay algo que no me estás diciendo por primera vez en toda la conversación él se detuvo No respondió de inmediato como si estuviera decidiendo si valía la pena decir lo que estaba a punto de decir luego con un suspiro pesado dejó el teléfono sobre la mesa y la miró directamente Mira Laura Ya no quiero

esta vida la taza de café en la mano de Laura tembló levemente qué estás diciendo él cruzó los brazos y la miró con expresión impaciente me pé de esto de este departamento pequeño de la rutina de vivir al día llevamos años aquí y no hemos avanzado en nada Yo quiero más Laura sintió un golpe en el pecho más sí Álvaro dejó escapar una risa seca tú sigues con las mismas ilusiones de siempre con tus tartas tu panadería creyendo que algún día algo cambiará pero no cambia Laura no vamos a ninguna parte el aire se volvió denso

Laura Lo miró con el corazón latindo con fuerza pensé que éramos felices él bufó negando con la cabeza tú tal vez pero yo no quiero éxito dinero u oportunidades y la verdad Laura tú no encajas en la vida que quiero las palabras la atravesaron Como un cuchillo sintió el suelo ceder bajo sus pies Me estás dejando Álvaro no desvió la mirada ni un segundo Sí Laura sintió un escalofrío recorrer la espalda por qué él tomó su maleta la cual ya estaba lista junto a la puerta porque hay alguien más el aire abandonó sus pulmones por un momento el mundo


pareció detenerse Laura sintió las piernas temblar pero logró mantener la compostura alguien más Álvaro asintió Bianca Ortega el nombre cayó como un golpe seco en su pecho quién es ella Álvaro sonrió como si el simple hecho de mencionarla lo llenara de satisfacción es una mujer increíble joven hermosa y con dinero mucho dinero su familia es influyente tiene contactos oportunidades con ella mi vida será diferente Laura sintió que se le formaba un nudo en la garganta Cuánto tiempo llevas viéndola unos meses la franqueza en su respuesta fue como una bofetada Laura sintió que
su cuerpo entero se tensaba entonces todo este tiempo me has estado engañando él no hizo ningún esfuerzo por negarlo las cosas ya no funcionaban entre nosotros Laura sintió un ardor detrás de los ojos no quería llorar no delante de él y Qué se supone que haga yo ahora Álvaro se encogió de hombros eso ya no es mi problema el estómago de Laura se retorció se llevó una mano al pecho intentando contener el dolor que la asfixiaba Y entonces como si aún no hubiera sido lo suficientemente cruel Álvaro dejó caer las llaves sobre la mesa Ah y el contrato del departamento

está a tu nombre a partir de ahora tú te encargas del alquiler Laura sintió que algo dentro de ella se rompía por completo Me estás dejando con todo el peso del alquiler yo ya hablé con el dueño como lo rentamos juntos me desu del contrato desde este mes tú lo pagas era demasiado él no solo la Estaba dejando por otra mujer no solo la estaba abandonando sin un mínimo de remordimiento también la estaba obligando a cargar con una responsabilidad que él ya no quería Laura sintió que las lágrimas querían escapar pero apretó los labios con fuerza no puedo creerlo Álvaro tomó la
maleta con una tranquilidad hiriente espero que puedas salir adelante Laura pero siendo sincero se giró hacia la puerta y le dedicó una última mirada nunca dejarás de ser lo que eres una simple pastelera y con esas palabras salió por la puerta cerrándola con firmeza Detrás de él El sonido del golpe resonó en el apartamento como un eco vacío como el final de algo irrecuperable Laura se quedó ahí de pie sintiendo como su mundo entero se desmoronaba a su alrededor el silencio fue lo peor porque en él entendió que estaba completamente sola las lágrimas
cayeron Sin Control se cubrió el rostro con las manos y dejó escapar un sollozo desgarrador todo había terminado el sonido de la puerta cerrándose tras Álvaro aún resonaba en la mente de Laura incluso días después de su partida la primera noche sin él fue la más difícil el apartamento se sentía enorme en su soledad cada Rincón le recordaba su presencia la taza de café que él siempre dejaba a medias el lado de la cama que ahora estaba intacto el Eco del silencio donde Antes había discusiones risas O al menos algo pero Álvaro ya no estaba y ella
tenía que seguir adelante el primer golpe llegó con la realidad del alquiler sabía que no podría sostenerlo sola por mucho tiempo a pesar de su empleo en la panadería El sueldo no era suficiente para pagar ese departamento sin hacer sacrificios que la llevarían a la ruina Así que no tuvo opción Con el poco dinero que tenía ahorrado buscó un lugar más económico donde empezar de nuevo después de recorrer varios vecindarios y rechazar lugares que parecían demasiado pequeños demasiado viejos o simplemente
demasiado deprimentes encontró uno que aunque Modesto le pareció acogedor un pequeño apartamento de una sola habitación con paredes descascaradas y muebles viejos pero con suficiente espacio para su cama y una cocina en la que con algo de esfuerzo podría sentirse en casa el día de la mudanza fue duro no tenía muchas pertenencias pero cada caja que empacaba llevaba consigo el peso de los recuerdos guardar su ropa en una maleta fue fácil lo difícil fue recoger los pequeños detalles de su vida con Álvaro la foto de su boda que terminó guardada en el fondo de una caja sin que ella se
atreviera a verla los libros que habían comprado juntos y que ahora parecían ajenos los platos que alguna vez sirvieron cenas en pareja y que ahora se apilaban solitarios cuando llegó a su Nuevo Hogar sintió el vacío más que nunca y por más que intentara convencerse de que estaba bien de que tarde o temprano superaría esto en ese momento solo sentía que había perdido todo a pesar del dolor Laura no no podía permitirse detenerse cada mañana se obligaba a levantarse temprano como siempre lo hacía se ponía su uniforme tomaba un café rápido y salía rumbo a la
panadería El trayecto al trabajo que antes hacía con prisa ahora lo recorría con la mirada perdida sintiendo que cada paso la acercaba a una rutina que había dejado de tener sentido su empleo siempre había sido un refugio un lugar donde podía ser ella misma donde su amor por la repostería le daba un propósito pero ahora Simplemente no tenía ganas de nada se sentía apagada como si estuviera en piloto automático Gabriela su mejor amiga y compañera de trabajo notó el cambio en ella desde el primer día Laura dijo en voz baja mientras la observaba
mezclar la harina con desgano no puedes seguir así él no te merecía Y insistió Gabriela apoyándose en la mesa frente a ella un hombre que te abandona así sin mirar atrás no merece ni una sola de tus lágrimas Laura esbozó una sonrisa triste no es solo Álvaro murmuró Es todo es empezar desde cero es sentir que todo lo que construí no sirvió de nada Gabriela cruzó los brazos y suspiró lo que construiste sigue Aquí Laura eres talentosa eres fuerte solo necesitas verlo pero Laura no lo veía porque en ese momento no creía que quedara nada en ella digno de ser
rescatado los días pasaron y la rutina continuó Aunque Laura no podía evitar sentirse vacía hasta que un día algo cambió estaba detrás del mostrador acomodando las tartas frescas que acababan de salir del horno cuando vio entrar a Doña Alba una clienta habitual de la panadería era una mujer mayor de rostro amable y sonrisa tierna que iba cada semana a comprar pasteles para su familia siempre pedía lo mismo una tarta grande de fresas con crema y otra de chocolate para sus nietos pero Laura había notado un detalle que nadie más
parecía ver cada vez que recogía su pedido Doña Alba miraba los postres con una expresión melancólica como si quisiera disfrutarlos pero supiera que no podía hacerlo ese día mientras la anciana sacaba su monedero para pagar Laura no pudo evitar preguntar Doña Alba por qué nunca compra algo para usted la mujer levantó la vista con una sonrisa resignada Oh querida dijo con dulzura no puedo comer azúcar soy diabética Laura sintió un nudo en el pecho pasaba cada semana compraba postres para su familia pero nunca para ella y sin embargo
siempre miraba las tartas con ese brillo nostálgico en los ojos como si recordara los tiempos en los que podía disfrutar de un dulce sin preocupaciones Laura sintió un impulso una chispa que no había sentido en semanas y si le preparo una Doña Alba la miró con sorpresa Cómo dices querida una tarta repitió Laura con entusiasmo sin azúcar para que pueda disfrutarla también la anciana parpadeó varias veces antes de soltar una risa suave eso sería maravilloso Pero se puede hacer Claro que sí solo hay que encontrar la receta perfecta por primera vez en mucho tiempo
Laura sintió algo moverse dentro de ella Doña Alba tomó su bolsa y se preparó para irse eres una buena chica Laura dijo con gratitud no muchas personas Piensan en los demás de esa manera Laura observó a la mujer salir de la panadería y se quedó en silencio con la mente en otra parte tal vez Gabriela tenía razón tal vez aún Había algo dentro de ella que valía la pena su rutina transcurría como cualquier otro día atender a los clientes tomar pedidos limpiar las bandejas y asegurarse de que todo estuviera en su lugar pero en su interior algo había cambiado desde su conversación con Doña
Alba la idea de crear una tarta sin azúcar no la había abandonado ni un solo instante cada vez que atendía a una persona cada vez que vendía un pastel no podía evitar pensar en todas las personas que como la anciana no podían disfrutar de esos postres cuántos clientes más habrían pasado por esa panadería con el mismo deseo frustrado Cuántos habrían mirado los dulces con anhelo solo para recordar que no podían comerlos Laura sabía que tenía que hacer algo aprovechar un momento de calma entre los pedidos se acercó a Don Ernesto el dueño de la panadería él era
un hombre de unos 60 años robusto y de pocas palabras con el cabello gris siempre cubierto por un gorro de chef estaba revisando un inventario en la trastienda cuando ella llamó su atención Don Ernesto tiene un minuto preguntó con una mezcla de nervios y determinación él alzó la vista de sus papeles y la miró con curiosidad dime Laura ella tomó aire y se armó de valor he estado pensando Por qué no añadimos una línea de tartas sin azúcar al menú algo para las personas que no pueden consumir dulces tradicionales como Doña Alba Don Ernesto
frunció el seño y se cruzó de brazos tartas sin azúcar Sí asintió ella ayer Doña Alba me dijo que siempre compra postres para su familia pero nunca para ella me hizo pensar que debe haber muchas otras personas en la misma situación si ofreci una opción para diabéticos podríamos ayudar a más clientes el hombre resopló sopesando la idea por unos segundos luego sacudió la cabeza con una expresión de escepticismo Mira Laura no digo que sea una mala idea pero realmente crees que se vendería la gente viene aquí buscando los Sabores de

siempre no sé si algo así llamaría su atención Laura sintió una punzada de decepción pero no se rindió podríamos Probar con una sola tarta insistió si los clientes la piden entonces podríamos hacer más pero Don Ernesto ya había tomado una decisión no quiero arriesgarme con algo que no sé si funcionará respondió con firmeza ya tenemos nuestros productos establecidos no veo necesidad de cambiar algo que nos da buenos resultados Laura bajó la mirada sintiendo cóm su entusiasmo se desinflan entiendo Don Ernesto la observó por un momento y con un tono menos Severo agregó si
quieres intentarlo por tu cuenta adelante pero en tu tiempo libre Laura asintió agradecida por lo menos por esa pequeña concesión y conforme avanzaba el día su frustración inicial comenzó a transformarse en algo más fuerte si el dueño de la panadería no quería arriesgarse ella sí lo haría no para vender la tarta No para probarle nada a nadie sino porque Doña Alba merecía al menos una vez disfrutar de algo hecho especialmente para ella esa noche después de una larga jornada de trabajo Laura llegó a su pequeño apartamento con una sola cosa en mente encendió la luz
de la cocina y dejó su bolso sobre la mesa sintiendo por primera vez en semanas una verdadera motivación su diminuta cocina no era la más equipada pero tenía Lo esencial una batidora vieja algunos moldes desgastados y una pequeña a la cena donde guardaba los ingredientes que había comprado de camino a casa tomó un cuaderno y comenzó a escribir combinaciones de ingredientes necesitaba encontrar la receta perfecta no quería que la tarta tuviera un sabor artificial o sin gracia no quería que fuera una de esas versiones dietéticas que sacrificaban el

sabor por la falta de azúcar quería que supiera cómo una tarta de verdad ató su cabello en una coleta se arremangó la blusa y con una mezcla de emoción y determinación comenzó a trabajar el primer intento fue un desastre la masa estaba demasiado dura como si hubiera olvidado un ingrediente clave el segundo intento no fue mejor el relleno se separó y la textura se volvió granulosa Laura suspiró y se apoyó contra la mesa observando el desastre a su alrededor harina por todo dos lados cucharas y tazones acumulados en el fregadero la
encimera cubierta de restos de masa pegajosa el reloj en la pared marcaba casi la medianoche y su cuerpo comenzaba a resentir el cansancio el sentido común le decía que debía Rendirse por hoy que podía intentarlo al día siguiente Pero su corazón decía otra cosa pensó en la sonrisa de Doña Alba en la ilusión en sus ojos cuando le mencionó la idea de un postre sin azúcar y supo que no podía detenerse ahí no podía fallarle respiró hondo y comenzó de nuevo Esta vez fue más meticulosa ajustó las proporciones de

los ingredientes dejó reposar la masa más tiempo probó con un endulzante diferente y se aseguró de que la mezcla tuviera la textura perfecta antes de meterla al horno cuando el aroma de la tarta comenzó a impregnar la cocina sintió un leve cosquilleo en el estómago algo le decía que esta vez estaba más cerca esperó pacientemente y cuando finalmente la sacó del horno dejó que se enfriara un poco antes de cortar un pequeño trozo y probarlo el sabor explotó en su boca y por primera vez en toda la noche sonrió lo había logrado la
textura era suave el dulzor equilibrado no había Rastros De ese regusto artificial que tanto temía era una tarta de verdad la colocó con cuidado en un recipiente asegurándose de que quedara Bien protegida miró el reloj y vio que pasaban de las 2 de la madrugada sus ojos ardían de sueño y su cuerpo pedía descanso pero por dentro algo se sentía diferente por primera vez en mucho tiempo sentía que había hecho algo que realmente importaba al día siguiente llevaría esa tarta a la panadería y cuando cuando Doña Alba la probara sabría que todo ese esfuerzo había

valido la pena el sonido del despertador rompió el silencio del Pequeño apartamento de Laura abrió los ojos con dificultad sintiendo el peso del cansancio en su cuerpo la noche anterior había sido larga pero a pesar de la fatiga una sensación de satisfacción la invadía se quedó acostada por unos segundos Recordando el momento exacto en que probó la última de la tarta había valido la pena cada intento fallido giró la cabeza y miró hacia la mesa de la cocina allí dentro de un recipiente cuidadosamente cubierto estaba la tarta que le había preparado a Doña Alba la
superficie dorada y brillante resaltaba los Trozos de fresas frescas acomodados con delicadeza en la parte superior creando un contraste hermoso con la crema que había preparado con tanto esmero se incorporó lentamente y se acercó para observarla mejor su aroma era dulce envolvente con un toque sutil de vainilla y almendras se sentía orgullosa por primera vez en mucho tiempo sentía que había hecho algo verdaderamente significativo aún en pijama sacó su teléfono y tomó una foto quería recordar ese momento no era solo una tarta sin azúcar era una prueba de
que aún podía hacer algo hermoso sonrió para sí misma y se preparó para el día cuando llegó a la panadería Gabriela ya estaba en la cocina organizando los ingredientes para la jornada Laura entró con su bolso apretado contra su pecho sintiendo una extraña mezcla de emoción y nervios y si la tarta no era lo que esperaba Y si Doña Alba no la disfrutaba tanto como ella imaginaba pero en cuanto vio a su amiga supo que no podía guardarse aquello para sí Gabi llamó con entusiasmo Gabriela que estaba cortando una barra de mantequilla
levantó la vista con curiosidad por qué tan animada tan temprano preguntó con una sonrisa Laura sacó el recipiente de su bolso con cuidado y lo colocó sobre la mesa tienes que ver esto Gabriela se secó las manos en el delantal y se acercó con interés cuando Laura destapó la tarta sus ojos Se abrieron con asombro Dios mío Laura exclamó es preciosa las fresas rojas y jugosas resaltaban sobre la crema blanca y brillante y la base dorada tenía un acabado perfecto Gabriela la observó más de cerca y luego miró a Laura con admiración la hiciste tú Laura asintió
con timidez sí es para Doña Alba Gabriela parpadeó sorprendida para Doña Alba sí Ayer me dijo que no puede comer azúcar y pensé que sería lindo hacer algo especial para ella Gabriela volvió a mirar la tarta ahora con una expresión de ternura amiga esto Es hermoso Laura sonrió con timidez crees que le guste Gabriela tomó un dedo de crema con curiosidad y lo probó en cuanto el sabor se fundió en su boca sus ojos se iluminaron esto es increíble exclamó sabe como una tarta normal Laura sintió un cosquilleo en el pecho de verdad por supuesto si no me lo hubieras dicho
Jamás habría imaginado que no tiene azúcar Laura dejó escapar un suspiro de alivio Gabriela le dio un pequeño empujón en el hombro Doña Alba se va a volver loca con esto Laura sonrió sintiendo que su confianza crecía poco a poco eso espero el día avanzó con la rutina habitual clientes entrando y saliendo pan recién horneado llenando el aire con su aroma cálido el sonido de la caja registradora acompañando el murmullo de conversaciones pero Laura apenas podía concentrarse cada vez que la campana de la puerta sonaba su corazón latía más fuerte y entonces finalmente Ella llegó
Doña Alba entró con su andar pausado su bolso bien sujeto en el brazo y la sonrisa amable que siempre la caracterizaba Laura sintió una oleada de emoción recorrer su cuerpo respiró hondo tomó el recipiente con la tarta y se acercó al mostrador Doña Alba llamó con entusiasmo la anciana la miró con sorpresa Buenos días querida Laura sonrió y le extendió el recipiente con ambas manos Esto es para usted Doña Alba frunció el ceño con curiosidad y miró la tarta a través de la tapa transparente sus labios se entre abrieron con asombro para mí sí dijo Laura con timidez Ayer
me contó que no puede comer azúcar Así que quise preparar algo especial Doña Alba abrió el recipiente con cuidado y sus ojos brillaron al ver la tarta Pero qué cosa más hermosa Gabriela que estaba detrás del mostrador se acercó con una gran sonrisa a poco no está perfecta Doña Alba la anciana tocó con delicadeza la orilla de la base como si no quisiera arruinar el momento Espero que le guste Doña Alba levantó la vista y le tomó la mano con suavidad querida no importa como sepa solo el hecho de que hayas hecho esto para mí ya es el mejor regalo Laura
sonrió sintiendo una calidez profunda en su pecho Doña Alba llevó el primer bocado a la boca con la misma delicadeza con la que una madre probaría la comida hecha por su hijo Laura sintió como la tensión se acumulaba en su pecho como si cada músculo de su cuerpo se hubiera congelado en el instante en que el tenedor tocó los labios de la anciana Gabriela a su lado contenía la respiración con los ojos fijos en la reacción de Alba por un momento todo se detuvo la anciana masticó lentamente dejando que el sabor se deshiciera en su
boca su rostro que al principio mostraba curiosidad cambió gradualmente a una expresión de sorpresa luego a una de genuina sus ojos Se abrieron un poco más como si no pudiera creer lo que estaba saboreando Dios mío susurró llevando una mano a su pecho No puedo creerlo Laura sintió un nudo en la garganta está bien Doña Alba la miró Y asintió con los ojos humedecidos por una emoción que iba Más allá del simple placer de comer hace años que no probaba algo así pensé que nunca volvería a disfrutar una tarta ocuparme Gabriela golpeó suavemente el
brazo de Laura con una sonrisa triunfante te lo dije sabía que te Quedaría perfecta Laura dejó salir el aire que había estado conteniendo y una sonrisa temblorosa apareció en su rostro todo el cansancio de la noche anterior todas las pruebas fallidas cada gramo de frustración todo había valido la pena Doña Alba cortó otro pedazo con más entusiasmo y lo llevó a su boca nuevamente saboreo con los ojos cerrados no tiene ese sabor artificial que suelen tener los postres sin azúcar no sabe a restricción sabe a felicidad Laura sintió Un calor reconfortante expandirse en su pecho Esa
era la idea dijo con timidez no quería que fuera una versión de dieta quería que fuera real la anciana dejó el tenedor sobre el platillo Y tomó la mano de Laura entre las suyas con un gesto lleno de ternura querida no solo lograste hacer una tarta sin azúcar lograste traerme un pedacito de mi pasado Laura sintió un leve cosquilleo en los ojos pero parpadeó rápidamente para contener las lágrimas no había mayor recompensa que ver a Doña Alba feliz Gabriela que había estado observando todo con una sonrisa de oreja a oreja sacó su teléfono y lo levantó en
dirección a la mesa a ver a ver esto hay que compartirlo Qué haces preguntó Laura divertida una foto dijo Gabriela entusiasmada esta tarta es una obra de arte y tengo que presumirla Doña Alba rió suavemente Y tomó su propio celular del bolso Si es así Yo también quiero tomar una Laura se sonrojó levemente al ver como la anciana posicionaba su teléfono y capturaba una imagen de la tarta con gran esmero para qué quiere la foto preguntó con curiosidad Doña Alba sonrió con picardía mientras te caba en su celular Tengo un grupo de WhatsApp con amigos que como yo no pueden comer

azúcar les contaré sobre esta maravilla que me acaban de regalar Laura abrió los ojos con sorpresa en serio por supuesto respondió Doña Alba con entusiasmo siempre estamos compartiendo aciones de comida pero nunca encontramos algo que realmente sepa bien Gabriela soltó una carcajada prepárate Laura se viene la fama Laura se rió pensando que su amiga solo estaba exagerando pero lo que no sabía era que en ese preciso instante su vida estaba a punto de cambiar para siempre Laura vio a Doña Alba salir de la panadería con la tarta en sus manos y
sintió una oleada de satisfacción en el pecho versus sonrisa llena de gratitud había sido suficiente para iluminar el día pero no esperaba que esa sensación se prolongara Más allá de ese momento sin embargo esa noche mientras estaba en su pequeño apartamento recibiendo el tenue resplandor de la farola desde la ventana su celular vibró sobre la mesa tomó el dispositivo sin mucho interés pensando que sería algún mensaje sin importancia Pero en cuanto leyó el remitente su corazón dio un pequeño brinco era Doña Alba sus dedos se

tensaron antes de desbloquear la pantalla hija no sé cómo agradecerte lo que hiciste por mí hoy no solo fue la tarta fue lo que significó para mí desde que me diagnosticaron diabetes pensé que nunca volvería a disfrutar un postre como los de antes no te imaginas lo que sentí al probarla cerré los ojos y por un momento volví a ser aquella joven que entraba a la pastelería de el centro los domingos Después de misa comprando una rebanada de tarta de frutas con crema disfrutándolo ni restricciones hoy volví a sentirme así fue un regalo fue un
milagro y lo más increíble es que tú lo hiciste posible Laura sintió un nudo apretarle la garganta pero el mensaje no terminaba ahí en mis amigas también quedaron maravilladas me pidieron que te preguntaras si podrías hacer cinco tartas más para la próxima semana me haría muy feliz poder compartirlas con ellas si no puedes lo entenderé Laura apretó el teléfono con ambas manos como si fuera algo frágil sus ojos se llenaron de Lágrimas sin que pudiera evitarlo había hecho cientos tal vez miles de pasteles en su vida pero nunca había recibido un mensaje como ese por

primera vez alguien le decía que su trabajo había hecho la diferencia en la vida de una persona respiró hondo antes de escribir su respuesta Claro que sí Doña Alba con mucho gusto haré más pero no terminó ahí apenas envió el mensaje llegaron otros más Hola Laura Soy amiga de Alba Podrías hacerme una tarta también Buenas noches haces otros postres sin azúcar mi esposo es diabético y me encantaría sorprenderlo me dijeron que hiciste un pastel increíble sin azúcar aún tomas pedidos Laura dejó elel sobre la mesa incapaz de procesar lo que estaba pasando no era
solo Doña Alba otras personas querían lo mismo se pasó una mano por el rostro y se dejó caer en el sillón sintiendo que la realidad se doblaba a su alrededor nunca en su vida había vendido un pastel por su cuenta siempre trabajaba bajo las recetas y reglas de la panadería siempre hacía lo que otros le decían Pero esto era diferente esto era suyo y por primera vez la idea de crear algo propio dejó de parecer un Sueño imposible a la mañana siguiente mientras amasaba la masa en la panadería Gabriela la observaba con los brazos cruzados y una
expresión divertida en el rostro tienes cara de que no dormiste nada comentó con una media sonrisa Laura dejó escapar un suspiro no dormí mucho la verdad déjame adivinar te pasaste la noche pensando en los pedidos Laura se detuvo un instante y la miró me están pidiendo más tartas Gabi muchas más Gabriela sonrió con entusiasmo Pues claro porque eres un genio de la repostería y la gente Por fin lo está notando Laura dejó la masa sobre la mesa y apoyó las manos en su cintura pero no sé si puedo hacerlo no
tengo suficiente espacio ni equipo ni siquiera sé cómo cobrar por ellas Gabriela puso los ojos en blanco y y le dio un leve empujón en el hombro Laura tienes oro en las manos Ya no puedes huir de esto no estoy huyendo protestó Solo que no sé por dónde empezar Gabriela chasqueó la lengua empieza aceptando los pedidos y viendo hasta dónde puedes llegar yo te ayudo con lo que necesites Laura la miró con un atisbo de Esperanza de verdad por supuesto exclamó Gabriela pero necesitamos organizarnos se quedó pensativa por un momento luego chasqueó los dedos como si hubiera tenido una revelación Ya sé deberíamos hacer una
página en redes sociales Laura arqueo las cejas una página Sí así la gente sabrá dónde hacer sus pedidos y podremos manejar mejor todo Laura no estaba completamente convencida no sé Gabi yo solo quería hacerle un regalo a Doña Alba y lo hiciste dijo Gabriela mirándola con intensidad pero ahora hay más personas que quieren Lo mismo Laura bajó la mirada la idea de tener su propia clientela de hacer algo fuera de la panadería le resultaba abrumadora pero al mismo tiempo la emocionaba bueno Supongo que podríamos intentarlo dijo finalmente Gabriela
sonrió con satisfacción y sacó su teléfono muy bien cómo llamamos la página se quedó en silencio pensativa miró hacia la ventana de la panadería y recordó La sonrisa de Doña Alba recordó la emoción en su voz cuando dijo que por un momento había vuelto a sentirse como en su juventud entonces la respuesta le llegó con total Claridad torta salva Gabriela levantó la mirada con sorpresa torta salva Laura asintió con una sonrisa Sí si no fuera por ella nunca habría empezado esto Gabriela le dio un abrazo rápido y emocionado me encanta torta salva suena elegante suena
especial Laura sintió una calidez recorrer su pecho por primera vez en mucho tiempo sentía que estaba en el camino correcto mientras Gabriela comenzaba a crear la página en su teléfono Laura miró la masa que tenía frente a ella y comenzó a imaginar un futuro que hasta hace unos días ni siquiera había considerado posible la brisa nocturna rozaba su rostro mientras Álvaro apoyaba los codos en la varanda del balcón con la mirada perdida en los jardines perfectamente podados de La Mansión la piscina iluminada reflejaba el cielo estrellado y la Inmensidad del
lujo que lo rodeaba a lo lejos el sonido de una fuente llenaba el silencio con su goteo constante y armonioso tenía todo lo que siempre quiso y sin emb algo en su interior comenzaba a quebrarse la copa de vino descansaba en su mano pero no la había probado en un buen rato se suponía que debía estar feliz se suponía que esta vida le traería satisfacción plenitud orgullo pero la sensación de vacío se hacía más evidente con cada día que pasaba desde que Bianca lo había sacado de su antigua vida y lo había traído a su mundo de lujos fiestas y excesos todo
había sido una Aventura emocionante no más preocupaciones económicas no más angustia por pagar la renta o por vivir con lo justo aquí todo lo tenía servido en bandeja de plata Pero a qué costo Bianca lo había recibido en su vida como si fuera un accesorio más un hombre atractivo que encajaba bien a su lado en las fiestas alguien a quien podía presumir moldear exhibir pero no lo veía como un igual y Álvaro no tardó en darse cuenta de que en este mundo nunca dejaría de ser el invitado El Forastero el pasajero al principio Pensó que con el tiempo Bianca lo tomaría en serio se
esforzó por encajar por adaptarse por demostrar que podía estar a su altura pero con cada evento al que asistía con cada cena de gala en la que lo sentaban entre empresarios que lo miraban con condescendencia se dio cuenta de que nunca sería parte de esta élite no tenía dinero propio no tenía apellido influyente no tenía poder y en este mundo sin eso no era nadie exhaló despacio y dio un sorbo a su vino el sabor amargo le raspó la garganta Bianca había organizado otra de sus reuniones exclusivas esa noche no lo había invitado a unirse a la conversación pero

tampoco le había dicho que se fuera como siempre simplemente lo ignoró pensó en Laura no quería hacerlo pero su mente lo traicionaba constantemente recordaba la forma en que ella lo miraba cuando estaban juntos con admiración con respeto con Amor sincero Bianca en cambio lo miraba con posesión Y ahora él lo notaba más que nunca suspiró y dejó la copa sobre la baranda Cómo llegó a esto desde que había tomado la decisión de dejar a Laura se dijo a sí mismo que nunca miraría atrás que no se arrepentiría que este era su destino Pero últimamente la idea de haber
cometido un error se volvía más insoportable el sonido de risas provenientes del interior lo sacó de sus pensamientos frunció el seño y entró en la mansión Bianca estaba sentada en un sofá de terciopelo Con una copa de champag en la mano y una sonrisa entretenida en los labios a su lado un hombre bien vestido de iones pulidas y cabello perfectamente peinado le susurraba algo al oído Álvaro se detuvo en Seco Bianca reía con él relajada con ese brillo en los ojos que solía tener cuando algo le divertía de verdad Pero

él ya no era la razón de esa risa algo oscuro y frío se instaló en su pecho qué está pasando aquí preguntó su voz más seria de lo que esperaba Bianca levantó la mirada y al verlo arque una Ceja con evid fastidio Álvaro cariño no hagas escándalos el hombre a su lado le dedicó una sonrisa educada Eduardo Montero se presentó extendiendo la mano Álvaro la ignoró Quién es él Bianca bebió un sorbo de su champag con total calma antes de responder un amigo de toda la vida Álvaro sintió como su mandíbula se tensaba Desde cuando los cigos que te susurran al oído Bianca soltó una
carcajada No seas ridículo la rabia burbujeo en su interior ridículo Bianca qué está pasando aquí ella suspiró como si estuviera lidiando con un niño caprichoso Álvaro por favor No empecemos con estas escenas solo quiero una respuesta y yo solo quiero disfrutar de mi noche Álvaro sintió que su piel ardía no estaba equivocado algo estaba pasando pero lo peor No era eso lo peor era que Bianca ni siquiera intentaba ocultarlo Eduardo sonrío y se puso de pie acomodándose el traje con una calma irritante Bianca querida creo que es mejor que los dejes solos no hace

falta Eduardo respondió ella con una sonrisa divertida Álvaro ya entiende Cómo son las cosas Álvaro sintió El golpe de esas palabras como un puñetazo en el estómago entiende Cómo son las cosas Eso significa iaba que esto no era nuevo que él había sido un ciego durante demasiado tiempo Eduardo le dio una palmada en el hombro con condescendencia antes de salir de la habitación Álvaro no se movió seguía clavado en el suelo con la rabia acumulándose en su pecho como un veneno que le quemaba las entrañas cuando la puerta se cerró detrás del hombre Bianca suspiró dejó su
copa sobre la mesa y se cruzó de piernas mirándolo con una mezcla de aburrimiento y fastidio Álvaro no eres un niño él apretó los puños Qué significa eso significa que si esperabas exclusividad Te equivocaste de mujer El golpe final Álvaro sintió que la cabeza le daba vueltas Bianca yo lo dejé todo por ti ella soltó una risa seca Ese fue tu error Bianca se puso de pie y caminó hacia él con la misma elega

ncia y frialdad de siempre escucha Álvaro me gustaste porque eras guapo encantador y entretenido Pero cariño tú no perteneces a este mundo él
tragó saliva Eso quiere decir que me estás dejando Bianca sonrió ladeando la cabeza Aún no pero lo haré cuando me aburra y con eso se giró y salió de la habitación dejándolo solo Álvaro se quedó ahí sintiendo como todo lo que había construido se desmoronaba en cuestión de minutos había cambiado todo por una fantasía Laura nunca imaginó que su vida pudiera cambiar tan rápido apenas unas semanas atrás se sentía atrapada en una rutina gris trabajando largas horas en la panadería regresando a su pequeño apartamento vacío y Durmiendo con la sensación de que su vida nunca avanzaría pero ahora cada día
parecía traer algo nuevo cada día más personas pedían su tartas sin azúcar Todo comenzó con Doña Alba y su grupo de amigas pero luego el boca a Boca hizo su trabajo la gente empezó a hablar probé una tarta sin azúcar que me hizo recordar mi infancia no sabe a postre de dieta sabe a algo que alguien preparó con amor por primera vez en años mi mamá pudo comer un pastel sin miedo Laura leía los mensajes con los ojos brillantes sin poder creer que todo esto estaba diendo gracias a un simple gesto había pasado tanto tiempo sintiendo que su trabajo no tenía valor que lo que hacía no era importante que ahora le
costaba procesar el impacto que estaba teniendo en otras personas Pero con cada mensaje con cada nuevo pedido empezaba a darse cuenta de algo había subestimado su propio talento esa tarde mientras amasaba en la panadería Gabriela la observaba con atención desde el otro lado del mostrador Cuándo me lo vas a decir Laura parpadeó sin dejar de trabajar la masa decirte qué Gabriela cruzó los brazos y la miró con una sonrisa divertida que estás empezando a tomarte en serio este negocio Laura dejó escapar una pequeña

risa no es un negocio Gabi Solo estoy ayudando a algunas personas Gabriela la interrumpió levantando una Ceja Ah sí Y cuántas un ayudas llevas ya Laura se detuvo por un momento y frunció el seño ni siquiera lo había contado se quitó la harina de las manos y sacó su celular abrió los mensajes de los clientes y comenzó a hacer una lista mental cinco tartas para Doña Alba y sus amigas tres pedidos de otras clientas del grupo dos encargos especiales para personas que nunca había visto en su vida cuatro más
para la siguiente semana 15 tartas en total su corazón un brinco nunca en su vida había hecho tantos pasteles por su cuenta Gabriela sonrió al ver su cara de asombro Exacto esto ya no es un favor es un negocio Laura tragó Saliva No lo sé Gabi yo no tengo nada formal no tengo un local no tengo equipo no tengo dinero para invertir Gabriela apoyó los codos en la mesa y la miró fijamente Y qué te detiene Laura se quedó en silencio Esa era la pregunta que había evitado hacerse durante días esa noche cuando
llegó a su apartamento se sintió diferente antes cada vez que cruzaba la puerta lo único que sentía era un vacío abrumador pero esta vez su pequeño hogar se sentía vivo había moldes apilados en la mesa harina en el suelo cajas de ingredientes en la esquina todo un desastre pero era su desastre era prueba de que estaba haciendo algo que realmente importaba se quitó el abrigo se ató el cabello y encendió el horno había más pedidos por entregar y no podía decepcionar a nadie con cada semana que pasaba Laura se volvía más eficiente aprendió a optimizar su tiempo
a calcular mejor las cantidades a organizar los pedidos pero su cocina seguía siendo demasiado pequeña apenas podía moverse entre los moldes y las bandejas su refrigerador estaba al límite de capacidad sabía que no podía seguir así por mucho tiempo un día mientras entregaba un pedido en una cafetería del centro el dueño del local la observó con curiosidad era un hombre de unos 40 años con una barba bien cuidada y gafas elegantes eres Laura Muñoz preguntó con interés Laura asintió sorprendida Sí el hombre extendió la
mano con una sonrisa Carlos Herrera soy el dueño de esta cafetería he estado escuchando mucho Sobre tus tartas Laura sintió que el aire le faltaba En serio sí varios clientes han preguntado si las vendemos aquí y me gustaría hacer una prueba Laura sintió que su pulso se aceleraba una prueba Carlos asintió déjame algunas tartas para vender esta semana si funcionan bien podemos hacer un acuerdo Laura sintió que las manos le temblaban un trato con una cafetería hasta ahora solo había vendido de manera informal Pero esto era diferente esto era dar el siguiente paso esto

significaba que su negocio era real Cuando Laura regresó a la panadería esa tarde Gabriela la vio llegar con los ojos abiertos como platos y un temblor en las manos qué te pasa viste un fantasma Laura se dejó caer en una silla y tomó aire un café del centro quiere vender mis tartas Gabriela parpadeó qué el dueño me pidió que deje algunas esta semana si se venden bien quiere hacer un acuerdo conmigo Gabriela la miró fijamente por dos segundos y luego sin previo aviso gritó de emoción Laura esto es increíble Laura aún no podía creerlo No sé qué hacer Cómo que no sabes qué
hacer obviamente tienes que aceptar pero y si no se venden Y si no les gustan y si Gabriela le tomó la cara entre las manos con firmeza Laura escúchame bien Estás creciendo Esto es lo que querías Laura tragó saliva era esto lo que quería miró sus manos las manos que amasaba la respuesta sí esto era exactamente lo que quería ese jueves cuando Doña Alba llegó a la panadería Laura ya tenía su decisión tomada se sentaron en una mesa como lo hacían cada semana y la anciana la miró con ternura En qué estás pensando hija Laura respiró hondo Y tomó las manos de Doña Alba

entre las suyas voy a hacerlo voy a llevar mis tartas más lejos los ojos de la anciana brillaron de emoción sabía que lo harías Laura sonrió Este era su sol el comienzo El sonido del cristal golpeando el mármol retumbó en la inmensa y fría sala Álvaro giraba lentamente la copa entre los dedos viendo El Whisky moverse con la misma indiferencia con la que Bianca lo trataba últimamente su reflejo en el líquido ambarino le devolvía una imagen borrosa y reconocible el reloj sobre la chimenea marcaba las 3:20 de la madrugada Bianca no estaba en casa otra
vez estaba cansado cansado de esperar cansado de fingir que no veía lo obvio cansado de ser un espectador en su propia vida la primera vez que Bianca no llegó a casa a tiempo se dijo a sí mismo que no era nada está ocupada tiene compromisos la segunda vez se convenció de que no tenía derecho a reclamarle no soy su dueño no puedo decirle qué hacer la tercera vez simplemente dejó de preguntar para qué hacerlo si Bianca respondía con la misma risa aburrida Ay Álvaro qué anticuado eres No necesitas saberlo todo una risa que al principio le había parecido seductora y llena de
confianza Ahora solo le parecía cruel se pasó una mano por el rostro y se inclinó hacia adelante apoyando los codos en sus rodillas le dolía la cabeza pero no era solo por el alcohol era algo más profundo algo que había estado siendo dentro de él Desde hacía meses algo que ya no podía ignorar lo dejó todo por esta mujer y ahora sentía que no tenía absolutamente nada el sonido de la puerta abriéndose lo hizo levantar la cabeza de golpe sus músculos se tensaron mientras El eco de los tacones de Bianca resonaba en la casa silenciosa ella apareció en el umbral de la sala como

una visión lejana envuelta en un elegante vestido de seda roja que le quedaba como una segunda piel se veía perfecta como siempre como si la noche fuera su escenario y el mundo estuviera diseñado para girar a su alrededor Álvaro no se movió ella lo miró con una sonrisa despreocupada y dejó su bolso sobre la mesa sigues despierto No era una pregunta no le importaba la respuesta Álvaro apoyó la copa sobre la mesa con más fuerza de la necesaria dónde estabas vi se quitó los pendientes como si no lo hubiera escuchado con
amigos el nudo en su pecho se apretó un poco más con Eduardo ella se detuvo Por un instante lo suficiente como para que él supiera que la pregunta no le había gustado pero cuando volvió a girarse hacia él su expresión era la misma de siempre una mezcla entre impaciencia y diversión y si así fuera Álvaro sintió que algo en su interior se quebraba no era rabia no era celos era humillación se puso de pie sintiendo que el suelo bajo sus pies no era tan firme como antes me estás engañando Bianca suspiró y se acercó a él con un aire de fastidio Álvaro cariño no seas infantil

Respóndeme ella lo miró con los ojos entornados Si tuviera algo con Eduardo qué cambiaría el silencio cayó sobre ellos como una losa de cemento sintió un vértigo momentáneo una sensación de caída libre porque la respuesta estaba en sus palabras porque lo que Bianca acababa de decirle con toda su frialdad y cinismo era que no importaba no importaba si lo engañaba o no porque él no importaba el vacío en su pecho se convirtió en un abismo Por qué estás haciendo esto preguntó en voz baja Bianca l deó la cabeza y lo observó con una sonrisa casi compasiva
Álvaro de verdad Pensaste que esto iba a durar para siempre él no supo qu responder Bianca suspiró y le pasó una mano por el rostro con suavidad un gesto que antes lo volvía loco Ahora solo le daba ganas de apartarse no me mires así murmuró Ella sabes que esto nunca fue serio Álvaro sintió un escalofrío recorrer la espalda para mí sí lo fue ella sonrió con tristeza fingida eso fue un error la rabia burbujeo en su interior un error sí te lo advertí desde el principio Álvaro yo no hago compromisos entonces que fui para ti
Bianca se encogió de hombros una distracción El golpe fue seco y directo Bianca le dio una última mirada sin ningún rastro de arrepentimiento y se alejó con paso elegante hacia las escaleras puedes quedarte aquí el tiempo que necesites dijo antes de desaparecer pero tarde o temprano esto se acaba cuando escuchó la puerta cerrarse en el piso de arriba Álvaro entendió que su tiempo se había acabado la casa tan inmensa se sintió más vacía que nunca las paredes que antes le parecían imponentes y elegantes ahora se sentían frías Y opresivas los muebles que alguna
vez admiró como símbolos de riqueza y estatus le parecían a ajenos los cuadros las lámparas los adornos nada de esto le pertenecía no tenía casa no tenía dinero no tenía amor Se dejó caer en el sofá y enterró la cabeza entre las manos lo había perdido todo pero más que eso se había perdido a sí mismo se puso de pie de golpe y se dirigió al bar tomó una botella de Whisky pero en lugar de servirse un trago la arrojó contra la el vidrio estalló en 1 pedazos el líquido dorado se escurrió por el suelo como un reflejo de su propia vida derramada Laura se encontraba frente a la cafetería el rincón del café con los
dedos apretados en torno a las asas de su bolso y el corazón martillo el pecho a través de los ventanales podía ver el movimiento constante dentro del local los meseros caminaban con bandejas llenas de café humeante los clientes conversaban animadamente y en el mostrador justo al lado de los cruasán y las galletas de mantequilla estaban sus tartas era la primera vez que veía sus postres expuestos en una vitrina que no fuera la de la panadería donde trabajaba era la primera vez que su nombre su trabajo se abría camino en el mundo de la repostería sin estar bajo la sombra

de otro negocio era su primera oportunidad real de hacer algo grande respiró hondo vas a entrar o te vas a quedar espiando desde aquí como una acosadora bromeó Gabriela de pie a su lado con los brazos cruzados Laura le lanzó una mirada nerviosa y si no se vendieron Gabriela bufó con impaciencia y le dio un leve empujón hacia la puerta Laura entra de una vez y Averígualo qué es lo peor que puede pasar Laura tragó saliva y antes de pensarlo demasiado empujó la puerta la campanilla sobre el marco sonó con suavidad anunciando su entrada de inmediato el
olor a café recién molido la envolvió era un aroma cálido acogedor que la tranquilizó un poco dio un paso dentro y desde el otro lado del mostrador el dueño del café Carlos Herrera la vio y sonrió ampliamente Laura justo estaba por llamarte su corazón dio un brinco eso era bueno o malo caminó hasta el mostrador con el estómago encogido de nervios Hola Carlos solo pasaba para ver cómo les fue con las tartas Carlos cruzó los brazos y la miró con una expresión calculadora como si estuviera disfrutando al verla sudar de anticipación Déjame ver hizo una pausa

dramática Nos dejaste cinco verdad Laura asintió sintiendo que su respiración se volvía más superficial Carlos sonrió de lado pues se vendieron todas en dos días Laura parpadeó Cómo dices se vendieron repitió Carlos divertido y rápido más rápido de lo que imaginé de hecho Laura sintió que su cuerpo se quedaba completamente inmóvil en serio Gabriela que estaba justo detrás de ella le dio un codazo en la costilla con una gran sonrisa en el rostro lo ves te lo dije Carlos apoyó los codos en el mostrador y bajó un poco la voz como si estuviera a
punto de contarle un secreto de hecho hubo clientes que preguntaron si teníamos más una señora me dijo que llevaba años sin poder disfrutar un postre sin culpa y que tu tarta le recordó los postres que su abuela hacía cuando era niña no solo se habían vendido habían dejado una impresión Así que quiero hacerte una oferta formal continuó Carlos Laura apenas podía pensar con Claridad oferta sí quiero que nos proveas de tartas Todas las semanas podemos hacer un un contrato acordar un pago fijo y que tus postres sean parte

oficial del menú las palabras flotaron en el aire cargadas de peso Laura sintió que su mundo entero se detenía un contrato un pago fijo un negocio estable era real Qué dices preguntó Carlos con una expresión expectante el miedo comenzó a retorcerse dentro del aura una parte de ella quería decir que no que aún no estaba lista que no tenía una cocina grande que no sabía Cómo manejar esto pero otra parte otra parte sabía que esta era su oportunidad respiró hondo y con el corazón latindo con fuerza en el pecho estiró la mano digo

que sí Carlos estrechó su mano con firmeza bienvenida a el rincón del café Laura acababa de cerrar su primer trato como emprendedora esa noche Laura y la celebraron en el pequeño apartamento no tenían copas elegantes ni un vino costoso pero compraron una botella barata en la tienda de la esquina y la sirvieron en vasos de vidrio como si fueran los más finos del mundo Gabriela alzó su vaso por torta salva Laura sonrío sintiendo que el corazón se le hinchaba de emoción y alzó el suyo por torta salva chocaron los vasos y
bebieron el vino barato tenía un sabor fuerte y un poco ácido pero en ese momento sabía a Victoria Gabriela la observó con orgullo Estás a punto de ser una empresaria amiga Laura apoyó la cabeza contra el respaldo del sofá y suspiró todavía no lo soy pero lo serás afirmó Gabriela con convicción Y qué sigue ahora Laura se quedó en silencio por un momento sabía la respuesta necesito un lugar más grande Gabriela asintió sí Tu cocina parece una fábrica clandestina de postres ambas rieron pero Laura estaba pensando en serio no podía

seguir así cocinando en un espacio pequeño hasta la madrugada sin equipo profesional necesitaba dar el siguiente paso a la mañana siguiente se puso en marcha tocó puertas envió mensajes preguntó a conocidos buscó en internet recorrió calles habló con dueños de restaurantes finalmente después de muchos intentos una panadería en el centro le ofreció su cocina en las noches cuando cerraban era un espacio Modesto Pero tenía hornos industriales y todo el equipo necesario era perfecto Laura firmó un acuerdo con el dueño y os

esa misma noche comenzó a trabajar ahí había dado un paso más hacia su sueño los pedidos aumentaban los clientes pedían más la cafetería vendía sus tartas cada vez más rápido y luego un día Laura recibió un mensaje que lo cambiaría todo era de una de las cafeterías más grandes de la ciudad Hola hemos oído hablar de tus tartas Nos gustaría probarlas en nuestro menú Laura dejó caer el teléfono y se llevó las manos a la boca sin poder creerlo su negocio que había nacido de un simple gesto de cariño hacia Doña Alba ahora estaba a punto de expandirse a lo grande

el sol abrasador caía a plomo sobre la ciudad quemándole la piel mientras caminaba sin rumbo por las calles su camisa que alguna vez había sido impecable y elegante ahora estaba arrugada y pegajosa de sudor sus zapatos de cuero que antes brillaban con cada paso Estaban sucios y cubiertos de polvo no había comido nada desde la mañana anterior cada paso le pesaba como si estuviera arrastrando el peso de todas sus malas decisiones porque en realidad lo estaba haciendo dos días antes Bianca lo había echado de
La Mansión sin un rastro de remordimiento ni siquiera fingió compasión simplemente lo miró desde la escalera con su impecable vestido de seda y una copa de vino en la mano como si estuviera despidiendo a un sirviente que había dejado de ser útil Álvaro dijo con su tono perezoso de siempre creo que ya ha pasado suficiente tiempo es momento de que te vayas las palabras lo atravesaron como cuchillas pero no discutió no había nada que discutir sin decir una palabra tomó la pequeña maleta con lo poco que le quedaba y salió por la puerta no miró

atrás pero eso no significaba que no sintiera el dolor ahora estaba ahí vagando por la ciudad como un hombre sin pasado ni futuro había llamado a los cigos que hizo en el mundo de Bianca a los empresarios con los que bebía whisky en eventos exclusivos a los hombres que le daban palmadas en la espalda cuando él era el novio de Bianca Ortega ninguno respondió los que sí lo hicieron lo hicieron con frialdad Álvaro ahora no puedo ayudarte estoy ocupado hablamos luego Lamento lo que pasó pero sabes cómo es esto la última llamada que hizo fue a

Eduardo el nuevo hombre en la vida de Bianca el mismo que lo había reemplazado sin esfuerzo Álvaro Por qué llamas dijo con una risa descarada al contestar Necesito que me escuches Ah no creo que sea necesario respondió Eduardo con un tono de burla evidente Bianca me dijo que ya hablaste con ella Álvaro sintió los músculos tensarse Mira amigo un consejo supéralo estas cosas pasan y con eso la llamada terminó Álvaro miró la pantalla de de su celular con el corazón latindo con fuerza Ese fue el momento exacto en el que entendió que no le
quedaba nada terminó en un parque dejándose caer en una banca con la cabeza baja y los codos apoyados en las rodillas sacó la billetera y revisó lo poco que quedaba 100 pesos ni siquiera se rió ya no le quedaban fuerzas ni para burlarse de sí mismo miró alrededor el mundo seguía girando como si nada de lo que le estaba pasando importara un grupo de niños jugaba cerca de la Fuente corriendo con alegría bajo el sol más allá una pareja de ancianos compartía un helado eran escenas simples cotidianas pero Álvaro se dio cuenta de lo vacía que había sido su vida con Bianca había
cambiado todo por un mundo de lujos y apariencias y había terminado sin absolutamente nada no supo cuánto tiempo pasó ahí mirando la nada hasta que su cuerpo se puso en movimiento por inercia sin darse cuenta había terminado en una calle familiar se detuvo en la acera y levantó la vista la panadería El lugar donde trabajaba Laura su corazón se encogió el letrero sobre la puerta seguía igual el aroma a pan recién horneado flotaba en el aire envolviéndolo en una ola de recuerdos Laura su cabello recogido en un moño
desordenado su sonrisa cálida la la forma en que le preparaba café en las mañanas la manera en que lo amaba sin esperar nada a cambio cerró los ojos con fuerza sintiendo una punzada en el pecho qué había sido de ella seguiría Aquí trabajando en el mismo lugar seguiría pensando en él tomó aire y cruzó la calle empujó la puerta con cautela y la campanilla sonó suavemente al entrar el aroma familiar lo golpeó de inmediato harina café illa sus ojos recorrieron el lugar en busca de Laura pero no estaba detrás del mostrador en su lugar había un hombre robusto con bigote canoso
Cuando levantó la vista y lo reconoció su expresión pasó de la sorpresa a la burla en cuestión de segundos Álvaro sintió que su estómago se apretaba bueno bueno dijo el hombre cruzándose de brazos Mira quién ha vuelto Álvaro tragó saliva Necesito saber algo Ah sí Y qué podría ser tan importante Laura el hombre soltó una risa baja y lo miró con incredulidad Laura tienes cara de venir a preguntar por ella Álvaro sintió un escalofrío recorrer la espalda sigue trabajando aquí el dueño de la panadería dejó escapar una carcajada seca Laura aquí sacudió la cabeza con incredulidad
Dime algo Álvaro tiempo llevas sin verla Álvaro sintió una presión en el pecho más de un año el hombre sonrió con diversión Entonces no tienes ni idea de nada verdad Álvaro sintió que el aire se volvía más pesado qué quieres decir el dueño se limpió las manos con un paño y apoyó los codos sobre el mostrador acercándose un poco Voy a disfrutar decirte esto se tomó un momento para saborearlo y luego dejó caer la noticia Laura no ha trabajado aquí en mucho tiempo Álvaro frunció el seño Entonces dónde está el dueño se rió de nuevo Dónde está lo miró con
diversión maliciosa Oh amigo te vas a llevar una sorpresa Álvaro sintió un escalofrío recorrer la piel el destino ese que él siempre creyó manejar estaba a punto de demostrarle que no tenía control sobre nada por primera vez en su vida tuvo mi de la respuesta el aire en la panadería se volvió espeso como si de repente todo el oxígeno hubiera desaparecido Álvaro sintió un hormigueo en la nuca una presión en el pecho una incomodidad que no supo explicar había entrado al local esperando ver a Laura tras el mostrador tal vez con las mejillas llenas de harina y esa mirada
dulce que él recordaba el dueño de la panadería seguía mirándolo con una sonrisa de triunfo como si llevara mucho tiempo esperando este momento qué quieres decir con que me voy a llevar una sorpresa preguntó Álvaro con el seño fruncido Aunque por dentro sentía que algo en él se rompía lentamente el hombre se cruzó de brazos y L deó la cabeza con aire pensativo disfrutando cada segundo de su incomodidad déjame preguntarte algo Álvaro su voz era pausada casi burlona cuando dejaste a Laura cuando la echaste
de la casa que compartían sin importarte lo que le pasara realmente creíste que iba a quedarse aquí Álvaro sintió un escalofrío recorrer la espalda no respondió nunca se había detenido a pensarlo nunca se preguntó Cómo había seguido Laura después de que él la dejó en su mente ella simplemente se quedó atrás atrapada en la misma rutina de siempre sin atreverse a hacer nada más allá de amasar pan y decorar pasteles en un local pero ahora algo le decía que estaba muy equivocado el dueño de la panadería resopló con una risa seca y negó con la cabeza lo sabía dijo con desdén no
pensaste en ella ni un solo segundo Álvaro sintió una opresión en el pecho el hombre se giró Y tomó algo de un estante cercano luego con un golpe seco dejó caer un periódico sobre el mostrador toma creo que esto responderá a tu pregunta Álvaro frunció el seño y corin con manos temblorosas tomó el periódico y lo desplegó lentamente sus ojos se encontraron con una gran foto en la sección de economía era Laura pero no la Laura que él recordaba vestía un uniforme de chef blanco elegante con detalles dorados en los puños y su nombre bordado con hilos

plateados su cabello caía en suaves ondas sobre sus hombros y su sonrisa reflejaba una que Álvaro jamás le había visto antes bajo la foto un titular en letras grandes capturó su atención como un golpe seco en el pecho tortas Alba la repostera que revolucionó el mercado de los postres saludables la cabeza le daba vueltas bajó la vista y leyó con dificultad los primeros párrafos del artículo Laura Muñoz comenzó horneando tartas en su pequeño departamento con la intención de ayudar a una amiga hoy torta salva se ha convertido en una de las marcas más reconocidas en repostería

saludable con planes de expansión y múltiples contratos con cafeterías y restaurantes gourmet cada palabra lo atravesaba como una cuchilla Laura tenía su propia empresa lauras había logrado lo que él siempre soñó para sí mismo el dueño de la panadería se cruzó de brazos y sonrió con satisfacción nada mal para alguien que según tú no tenía ambición no Álvaro sintió un sabor amargo subirle por la garganta su mente lo arrastró a los recuerdos que había tratado de enterrar recordó la noche en que hizo las maletas y le dijo a Laura que ella nunca cambiaría no tienes visión
Laura nunca vas a ser más que una simple pastelera recordó la forma en que sus ojos se llenaron de Lágrimas yo no necesito ser rica para ser feliz en ese momento le pareció una respuesta patética pero ahora mirándola en el periódico entendió que ella nunca fue la mediocre en la relación el mediocre había sido él y ahora estaba pagando el precio dónde está ahora preguntó con voz áspera sin levantar la vista del periódico el dueño de la panadería soltó una carcajada Quieres verla Álvaro asintió lentamente con el corazón latindo tan fuerte que podía sentirlo en

los oídos el hombre sacó su celular del bolsillo y deslizó la pantalla luego con una expresión de triunfo giró el teléfono y se lo mostró era un anuncio de una inauguración gran apertura de torta salva nueva sucursal en el centro de la ciudad bajo el título en letras más pequeñas había un detalle que terminó de aplastarlo con la presencia de la fundadora Laura Muñoz el aire pareció desaparecer de su sus pulmones no solo tenía un negocio ahora estaba expandiéndonos tal vez deberías ir aunque dudo que Laura quiera verte
Álvaro sintió las piernas aflojarse el destino que tantas veces le había sonreído ahora lo golpeaba sin Piedad mientras él había caído al fondo Laura se había elevado hasta donde él nunca imaginó la cabeza le daba vueltas se apoyó en el mostrador tratando de estabilizar su respiración no podía creerlo Laura no solo había seguido adelante sin él había triunfado el cielo sobre la ciudad se tornaba de un gris melancólico mientras Alvaro deambulaba Sin rumbo fijo por las calles su mente estaba nublada su avanzaba por inercia pero su cabeza aún daba vueltas con la
información que acababa de recibir el periódico seguía apretado entre sus dedos ligeramente arrugado por la tensión con la que lo sostenía Laura Muñoz su Laura ya no era la misma no era la mujer sumisa que él había dejado atrás no era la joven conformista que en su mente nunca llegaría lejos ahora era una empresaria exitosa conocida en todo el país mientras él se arrastraba en la miseria ella había ascendido se llevó una mano a la cara sintiendo la piel ardiente el peso del cansancio y de una verdad que nunca quiso afrontar él la
había menospreciado se detuvo en una esquina apoyando la espalda contra la pared de un edificio sentía que el aire le faltaba que sus piernas apenas podían sostenerlo desde que salió de la panadería no había dejado de revivir en su mente cada momento que pasó con Laura cada vez que la hizo sentir pequeña cada vez que la ignoró Mientras ella hablaba con ilusión sobre sus postres sobre la repostería que tanto amaba cada vez que la hizo sentir que no era suficiente el destino le estaba pasando factura se pasó una
mano por el cabello tratando de ordenar sus pensamientos necesitaba respuestas necesitaba saber más sacó suel con manos temblorosas y escribió su nombre en el buscador Laura Muñoz torta salva los resultados aparecieron de inmediato artículos entrevistas reportajes sobre su éxito decenas de páginas hablaban de su talento de cómo había revolucionado la repostería saludable de cómo había construido un imperio desde la nada deslizó la pantalla hasta encontrar un video de una entrevista reciente el título le provocó escalofrío Laura Muñoz
la historia de lucha y éxito detrás de torta salva dudó por un momento antes de presionar Reproducir bienvenida Laura es un placer tenerte aquí la voz de la presentadora resonó en sus oídos mientras la imagen en pantalla mostraba a Laura acomodándose en un elegante sofá de estudio llevaba un conjunto impecable en tonos pastel y su cabello caía en suaves ondas sobre sus hombros se veía segura Serena completamente diferente a la mujer que él recordaba Álvaro tragó saliva gracias por la invitación respondió Laura con una sonrisa profesional el corazón de Álvaro la tía con fuerza le costaba reconocerla Laura
tu historia ha inspirado a muchas personas hace apenas unos años nadie conocía tu nombre y ahora diriges una de las marcas de repostería saludable más exitosas del país cuéntanos Cómo empezó todo Laura bajó la mirada por un momento como si estuviera reviviendo el pasado luego respiró hondo y respondió con calma mi historia no comenzó con éxito al contrario empezó con una caída Álvaro sintió como su pecho se oprimía hace unos años lo perdí todo la pantalla mostraba imágenes de sus primeros días de su pequeño
departamento con apenas espacio para hornear de su primera tarta en una caja sencilla me encontré sola sin dinero sin un hogar el estómago de Álvaro se revolvió sabía que hablaba de él sabía que se refería a la noche en que él la abandonó sin mirar atrás pero lo que Laura dijo después lo dejó sin aliento y lo más difícil es que también perdí a mi bebé Álvaro sintió que su cuerpo entero se congelaba qué la pantalla mostraba a Laura con una expresión Serena pero sus ojos reflejaban el peso de ese dolor no lo supe Al principio continuó estaba tan
abrumada por la tristeza por el estrés que no me di cuenta de que estaba embarazada el aire desapareció de los pulmones de Álvaro Dios susurró sintiendo como su visión se nublaba pero no tuve tiempo de asimilarlo siguió Laura mi cuerpo no soportó la y lo perdí la presentadora la miró con tristeza debió ser devastador Laura asintió con una pequeña sonrisa llena de melancolía lo fue Álvaro sintió que sus piernas cedían y tuvo que apoyarse contra un poste de luz Laura había estado embarazada y él nunca lo supo su
hijo un temblor le recorrió todo el cuerpo su mente trataba de procesarlo pero era imposible era demasiado había creído que lo peor que había hecho fue dejarla sin dinero sin hogar sin apoyo pero ahora entendía que la había dejado en el momento más vulnerable de su vida en el instante en que más lo necesitaba y como si el destino quisiera asegurarse de que lo entendiera completamente una imagen en una pantalla gigante al otro lado de la calle lo golpeó con más fuerza que cualquier palabra una valla publicitaria con la imagen de Laura con el logo de tortas salva en grande debajo
un lema en letras doradas transformando el dolor en dulzura el pasado en éxito y las heridas en fuerza Álvaro sintió que algo dentro de él se quebraba Laura no Solo lo había superado había convertido su peor sufrimiento en El combustible de su éxito y él él no era más que un fantasma en su historia el peso de la verdad seguía oprimiendo el pecho de Álvaro mientras se alejaba de la avena con la imagen de Laura en la valla publicitaria todavía grabada en su mente sus pasos eran torpes sin dirección como

si su cuerpo no supiera Hacia dónde ir después del golpe brutal que acababa de recibir cada latido en su pecho resonaba con un eco sordo cada respiración le costaba más que la anterior Laura había estado embarazada era una frase que no dejaba de repetirse en su mente como una sentencia inevitable había creído que lo peor que había hecho fue dejarla sin dinero sin hogar sin apoyo pero ahora entendía que la había dejado en el momento más vulnerable de su vida en el instante en que más lo necesitaba el dolor era insoportable pensó en todas las veces que la había ignorado mientras hablaba
de sus sueños en cada momento en que la hizo sentir pequeña en cada palabra cruel que usó para desmerecer sus aspiraciones recordó la forma en que la miró con desprecio la última vez que estuvieron juntos la manera en que se sintió superior cuando cerró la puerta trás de sí sin importarle el dolor que le causaba se llevó una mano al rostro y sintió La Piel Caliente Ardiendo por la humillación y el remordimiento nunca había sentido un vacío tan grande un arrepentimiento tan profundo no solo había perdido a Laura

sino que había perdido un hijo que nunca conoció una familia que ni siquiera supo que pudo haber tenido el estómago se le revolvió con una punzada de angustia no había comido en todo el día y el hambre mezclada con el cansancio le provocaba un mareo insoportable buscó un lugar donde sentarse y encontró una banca solitaria en la Plaza Central se dejó caer sobre ella y enterró el rostro en sus manos no tenía a dónde ir no tenía dinero no tenía amigos en quienes confiar se frotó los ojos con frustración y dejó escapar
un suspiro entrecortado no podía seguir así no podía quedarse en la calle vagando sin rumbo esperando que alguien sintiera lástima por él nadie lo haría tenía que encontrar una manera de sobrevivir las siguientes horas fueron un Calvario con la poca dignidad que le quedaba Álvaro recorrió varias calles en busca de trabajo entró en cafeterías restaurantes pequeños panaderí cualquier lugar donde tal vez necesitaran a alguien como él pero su apariencia no lo ayudaba su ropa estaba arrugada sus ojos hundidos su barba
crecida y desordenada cada vez que pedía hablar con un encargado recibía la misma mirada de desconfianza lo sentimos ya tenemos el personal completo no estamos contratando en este momento déjanos tu número y te llamamos y se abre una vacante Pero sabía que era no lo llamarían nadie quería contratar a alguien que Lucía como un hombre Derrotado alguien que había caído de la cima al suelo en el tiempo que dura un pestañeo siguió caminando con el estómago rugiendo y la desesperación apretándole el pecho sentía los pies
Ardiendo por el cansancio los músculos entumecidos por el esfuerzo de todo un día deambulando sin rumbo cuando pasó frente a un restaurante elegante con grandes ventan canales y luces cálidas se detuvo un momento para mirar hacia adentro los meseros iban y venían con bandejas cargadas de platillos exquisitos las mesas estaban ocupadas por clientes bien vestidos conversando con tranquilidad mientras disfrutaban de sus cenas le costó aceptar que hacía no mucho tiempo él era uno de esos clientes era el hombre que se sentaba en esos
lugares de lujo con una copa de vino en la mano creyendo que tenía el mundo a sus pies nunca imaginó que en cuestión de meses sería él quien estaría afuera observando Desde la distancia como un extraño se obligó a apartar la vista y estaba por seguir caminando cuando vio un cartel pegado en la entrada lateral del restaurante se busca auxiliar de gerente experiencia requerida sintió su corazón dar un pequeño salto eso podía hacerlo tenía experiencia administrando un esp entendía de clientes de atención

al público era un trabajo muy por debajo de lo que solía tener Pero al menos significaba una oportunidad sin pensarlo demasiado entró el interior del restaurante era elegante y sofisticado con un aroma delicioso a especias y carne asada flotando en el aire se dirigió a la recepción y pidió hablar con el gerente minutos después Un hombre alto y de cabello gris apareció desde una oficina en la parte trasera su traje bien planchado y su expresión seria le dieron a Álvaro la impresión de que sería difícil convencerlo Buenas noches

En qué puedo ayudarle preguntó el gerente con Tono Cortés pero distante Álvaro tragó saliva y se obligó a hablar con confianza vi el cartel Afuera estoy interesado en la vacante de auxiliar de gerente Tengo experiencia en administración y servicio al cliente el hombre Lo miró de arriba bajo la evaluación en sus ojos era evidente dónde trabajó antes fui gerente en un espa de alto nivel durante varios años el hombre levantó una Ceja intrigado y Por qué dejó ese trabajo Álvaro sintió la garganta seca no podía decir la verdad no podía decir que dejó todo por
una mujer que lo usó y lo desechó como un accesorio viejo circunstancias personales respondió sin entrar en detalles el gerente lo estudió por un momento más antes de asentir lentamente bien podemos hacer una prueba por una semana si funciona te quedas Álvaro asintió sintiendo una mezcla de alivio y vergüenza había conseguido trabajo pero era un puesto mucho más bajo de lo que alguna vez tuvo no podía quejarse era esto o la calle empiezas mañana dijo el gerente sé puntual Álvaro salió del restaurante con una sensación extraña en el pecho no era felicidad no era orgullo
era simplemente aceptación El destino lo estaba obligando a empezar desde abajo no tenía opción el sonido de los cubiertos chocando contra los platos las conversaciones de los clientes mezclándose con la música ambiental y la rutina acelerada del restaurante conformaban el escenario de su nueva vida para cualquiera que lo viera desde afuera todo Parecía un lugar de trabajo más con su propio ritmo y su propio caos ordenado pero para Álvaro cada minuto en ese sitio se sentía como un recordatorio constante de lo lejos que había caído

dos semanas atrás dormía en una cama de lujo con sábanas de algodón egipcio Y un armario lleno de trajes impecables ahora usaba un uniforme que no le pertenecía realizaba tareas que jamás imaginó hacer y tenía que aceptar órdenes en lugar de darlas ya no era el hombre que se caba en los mejores restaurantes de la ciudad para disfrutar de una cena sin preocuparse por los precios era el hombre que servía a aquellos que ahora ocupaban su lugar y aunque El golpe a su orgullo ya era suficiente el destino aún
Tenía algo más preparado para él estaba organizando algunas comandas en la cocina cuando una de las meseras dejó un menú sobre el mostrador lo tomó con la intención de revisar los platos del día sin imaginar que un simple vistazo a ese papel lo haría sentir como si el suelo se abriera bajo sus pies postre del día tarta de chocolate sin azúcar receta exclusiva de torta salva el aire se le atasc en los pulmones los dedos con los que sostenía el menú se tensaron hasta arrugar el papel volvió a leer la línea

con la esperanza Absurda de que su mente le estuviera jugando una mala pasada pero ahí estaba claro impreso en tinta negra sobre la carta del restaurante donde trabajaba el nombre de Laura su boca se secó de inmediato su pecho se encogió con un dolor sordo y profundo los murmullos del restaurante se convirtieron en un zumbido lejano nada más existía en ese momento solo esas palabras solo ese nombre Laura no era suficiente con que ella hubiera triunfado sin él no era suficiente con que ahora tuviera su propia empresa su
propio nombre resonando en la ciudad su propia historia de éxito no el destino Había decidido obligarlo a vivir bajo su sombra ahora Cada día que trabajara en este restaurante tendría que ver su éxito reflejado en cada postre servido en cada elogio de los clientes en cada tarta que se vendiera y lo peor era que ella ni siquiera eraa consciente de ello mientras él la veía en cada Rincón de su nueva realidad ella probablemente ni recordaba su existencia todo bien preguntó un mesero a su lado notando su rostro pálido y su
expresión rígida Álvaro parpadeó varias veces tratando de recomponerse Sí sí murmuró con la voz áspera apartando el menú rápidamente pero su mente no podía apartarse del peso de la verdad apretó la mandíbula con fuerza sintiendo una rabia Absurda crecer dentro de él no era justo él había sido el hombre con ambición el que quería más de la vida El que se atrevió a buscar algo mejor y sin embargo ahora estaba sirviendo mesas mientras Laura se convertía en un nombre respetado en la industria era una ironía cruel apretó los puños sintiendo que la
frustración ardía en su interior acaso el universo entero se había confabulado en su contra pero la respuesta era obvia no era el universo era él mismo él había acabado su propia tumba con cada decisión que tomó y ahora estaba pagando por ello el reloj marcaba las 9 de la noche cuando el gerente del restaurante entró a la cocina con suporte serio y su voz firme mañana tendremos un evento especial anunció una cena privada con invitados importantes quiero que todo el personal esté impecable y que el servicio sea perfecto los empleados asintieron en silencio
Álvaro solo escuchaba a medias tenía la mente en otra parte perdida en el Torbellino de pensamientos que lo atormentaban desde que leyó ese menú Pero entonces el gerente mencionó algo que lo sacó de golpe de su ensimismamiento también vendrá un proveedor importante será una de las presentaciones más grandes del año para él así que debemos asegurarnos de que todo salga sin inconvenientes Álvaro no le prestó mucha atención hasta que escuchó el que el gerente pronunció a continuación Laura Muñoz la dueña de torta salva Estará
presente el estómago de Álvaro se hundió sintió que la sangre se le helaba no podía haber escuchado bien pero el gerente contin continuó como si nada Ella ha sido una gran aliada para este restaurante y queremos fortalecer nuestra relación comercial con su empresa es una mujer con visión ha construido algo admirable así que cuando llegue quiero que se le trate con la máxima cortesía y respeto el suelo pareció desaparecer bajo sus pies Laura vendría aquí mañana a este restaurante a este mismo lugar donde él trabajaba como un simple auxiliar atendiendo clientes limpiando
mesas aceptando órdenes el hombre que una vez le dijo que nunca Sería más que una pastelera sin ambición ahora tendría que verla entrar como una mujer poderosa una empresaria admirada y respetada y él no era más que un empleado insignificante en la sombra de su éxito el destino Lo ponía frente a frente con la realidad que él mismo creó y lo peor de todo era que no tenía escapatoria el restaurante brillaba con la elegancia de una noche especial las luces tenues rezaban el reflejo de las Copas de Cristal el murmullo de las conversaciones se mezclaba con la suave
música ambiental y el el aroma de platillos exquisitos flotaba en el aire para la mayoría de los invitados era solo una velada más una celebración entre tantas pero para Álvaro esta noche significaba algo más desde el momento en que escuchó su nombre en Boca del gerente sintió que su destino estaba sellado podía sentir el peso del pasado acercándose a cada minuto un pasado que él mismo había construido y del que nunca había imaginado que un día trataría de pasó la tarde sumido en una inquietud que no lograba controlar con el corazón latindo con una fuerza que parecía
anunciar la inminencia de su propia caída sabía que Laura llegaría en cualquier momento intentó convencerse de que podría evitarla de que el restaurante era lo suficientemente grande como para mantenerse fuera de su vista de que no tendría que enfrentar lo que tanto temía pero una parte de él sabía que ese encuentro era era Inevitable Y entonces la puerta se abrió No necesitó mirarla de inmediato para saber que era ella lo sintió el aire pareció cambiar las conversaciones bajaron sutilmente de tono unos pocos
giraron la cabeza con discreción otros continuaron con sus Brindis y charlas sin notar la diferencia pero para Álvaro todo lo demás dejó de existir cuando finalmente alzó la mirada el impacto fue brutal la aur estaba ahí de pie en la entrada irradiando una seguridad que lo dejó sin aliento vestía un vestido negro elegante sencillo sin adornos innecesarios pero que rezaba su porte con una sofisticación natural su cabello caía en suaves ondas sobre sus hombros y su mirada estaba Serena como si cada paso que daba en ese lugar le perteneciera no había rastro de la mujer que él abandonó no había huellas del
dolor que él le causó la Laura que tenía frente a él era alguien completamente distinta y él no formaba parte de esa nueva versión de ella el gerente del restaurante se apresuró a recibirla con una sonrisa de bienvenida señora Muñoz qué placer tenerla aquí ella le devolvió el saludo con amabilidad sin exageraciones sin pretensiones gracias Me alegra estar aquí esta noche y Con razón continuó el gerente con entusiasmo una celebración muy merecida Felicidades por la expansión de torta salva es increíble lo que ha logrado expansión no solo había creado su propio negocio
ahora estaba vendiendo franquicias sintió que el cuerpo entero se tensaba una parte de él quería correr desaparecer antes de que ella lo viera pero ya era tarde en el momento exacto en que pensó en darse la vuelta Laura giró la cabeza casualmente riendo el restaurante con la mirada y sus ojos se encontraron el aire se volvió pesado el tiempo pareció detenerse Álvaro sintió como su pecho se contraía esperando alguna reacción de su parte cualquier señal de emoción de enojo de sorpresa pero no hubo nada

Laura Lo miró con la misma serenidad con la que miraría a cualquier otra persona en la sala sin titubeos sin nostalgia sin rastro de la que alguna vez lo amó ese era el peor castigo de todos ella dio un par de pasos en su dirección con la misma confianza que había demostrado desde que entró Álvaro sintió las piernas pesadas como si su cuerpo se negara a moverse cuando Laura estuvo frente a él lo observó con una leve inclinación de la cabeza y preguntó con voz tranquila Qué haces aquí Álvaro preguntó con una calma absoluta como si de verdad no le afectara su

presencia él tragó en seco y bajó la mirada Por un instante no podía mentirle no tenía sentido trabajo aquí admitió en voz baja con la vergüenza estrujándolo Laura no reaccionó de inmediato solo lo observó como si estuviera procesando la ironía del destino él sirviendo mesas en el restaurante donde ella era la invitada de honor Álvaro sintió que debía decir algo más que no podía dejar que ese momento terminara así y entonces antes de que el miedo lo paralizara por primera vez en su vida fue completamente honesto Laura yo yo sé que no tengo
derecho a pedirte nada sé que no hay nada que pueda decir para cambiar el pasado ella no respondió pero tampoco apartó la mirada él respiró hondo sintiendo el peso de su propia culpa pasándole los hombros fuiste la única persona que me amó de verdad la única que me respetó que estuvo conmigo sin esperar nada a cambio y yo yo te fallé los ojos de Laura no mostraron debilidad pero algo en su postura cambió levemente todos estos años pensé que había tomado la mejor decisión que al irme estaba eligiendo una vida mejor pero me equivoqué daría todo todo lo que tengo
por volver atrás y hacer las cosas bien Laura cerró los ojos por un breve instante Álvaro vio un Destello de emoción en su rostro una sombra del pasado reflejada en ella pero cuando volvió a abrirlos su mirada era firme tarde Álvaro él sintió que el corazón le daba un vuelco lo sé y lo siento Lo siento tanto su voz se quebró cuando el recuerdo de la entrevista Le golpeó con fuerza Laura el bebé yo no sabía ella bajó la mirada un instante no no lo sabías Álvaro sintió las lágrimas arder le en los ojos Perdóname susurró su voz
apenas un hilo de aire por todo Laura Lo miró fijamente Y por un momento el tiempo pareció suspenderse entre ellos un torbellino de recuerdos de dolor de despedidas de todo lo que alguna vez fueron y lo que jamás volverían a ser Entonces ella sonrió pero no fue una sonrisa de burla ni de resentimiento fue una sonrisa Serena como si en ese instante hubiera llegado a la conclusión final de su historia sabes Álvaro durante mucho tiempo me pregunté por qué me hiciste Esto me atormente buscando respuestas creyendo
que había algo malo en mí pero ahora lo veo con Claridad tomó una copa de champag de la mesa cercana la sostuvo con elegancia y con una voz tranquila pero firme pronunció las palabras que sellaría su destino si no hubiera sido tan egoísta y cruel nunca habría cambiado mi vida levantó la copa en un gesto de brindis Así que gracias Álvaro bebió un sorbo con la misma gracia con la que había dicho aquellas palabras y sin esperar respuesta se giró y caminó de regreso a su mesa donde la esperaban Los Dueños del restaurante y su nuevo mundo Álvaro sintió que su

pecho se vaciaba por completo no era ni siquiera digno de su rencor y eso más que cualquier otro castigo fue su verdadera condena Álvaro sintió el vacío en su pecho expandirse mientras veía a Laura alejarse sus pasos eran firmes su postura erguida su vestido de seda resplandecía bajo la luz dorada del restaurante no hubo despedida no hubo un último vistazo ni una pizca de duda en su andar simplemente se fue y él paralizado en medio del restaurante comprendió que acababa de perder lo único que alguna vez valió la pena en su
vida era demasiado el peso del remordimiento la culpa la amarga certeza de que el destino lo había castigado con precisión quirúrgica todo bien Álvaro preguntó un compañero mesero al pasar sin realmente esperar respuesta no nada estaba bien necesitaba desaparecer de ahí escapar pero justo cuando intentaba perderse entre las mesas un murmullo comenzó a llenar el ambiente Álvaro curioso pero temeroso se giró lentamente Y entonces llegó el golpe final Alejandro Montenegro acababa de entrar al restaurante el imponente empresario
caminó con la seguridad de un hombre que sabe exactamente lo que vale alto elegante con el porte de alguien acostumbrado a estar en la cima Alejandro se abrió paso con naturalidad entre las mesas en una mano llevaba un ramo de flores exquisitamente arreglado Álvaro sintió un escalofrío al verlo acercarse a Laura ella al notar su presencia sonrió con una calidez que nunca había visto en ella cuando estaba a su lado Alejandro extendió el ramo hacia Laura y le susurró algo al oído algo que la hizo reír suavemente antes
de inclinarse para recibir un beso en los labios Álvaro sintió como el estómago se le encogía no solo la había perdido ella había encontrado algo mucho mejor todo a su alrededor se desvaneció los murmullos del restaurante El murmullo de las conversaciones el tintineo de las copas solo veía a Laura y Alejandro juntos sabes quién es él susurró una voz a su lado Álvaro parpadeó volviendo de golpe a a la realidad se giró y vio al gerente del restaurante observando la escena con una sonrisa complacida él preguntó Álvaro con voz áspera aunque
en el fondo ya conocía la respuesta el gerente asintió con un gesto de admiración Alejandro Montenegro uno de los empresarios más ricos del sector de supermercados un hombre de poder de influencia Y al parecer el hombre que tiene el corazón de Laura Muñoz Álvaro sintió que las piernas le flaqueaban no solo Laura había logrado el éxito no solo había construido su imperio no Solo lo había dejado atrás sin rastro de rencor ahora además estaba con un hombre que era todo lo que él jamás pudo ser cerró los ojos por un momento sintiendo
una presión insoportable en el pecho quiso gritar quiso llorar quiso maldecir su propia estupidez pero no hizo nada no podía hacer nada porque ya no tenía derecho a nada apretó la mandíbula y con voz apenas audible murmuró el destino realmente me dio una lección inolvidable si te gustó este desenlace regálanos un me gusta y apóyanos para seguir trayéndote más historias impactantes crees que Álvaro merecía otra oportunidad o el destino hizo justicia déjalo en los comentarios comparte este video con alguien que necesite una lección de vida y no no te vayas aún Haz
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